ÉXITO ROTUNDO EN UNOS JUEGOS MARCADOS POR EL ESPÍRITU DEPORTIVO
Las aulas y nuestro patio se transformaron en escenarios de competición y camaradería durante los I JUEGOS OLÍMPICOS AL-ANDALUS 2000.
La jornada inaugural estuvo marcada por un desfile inaugural, donde el alumnado, dividido en equipos representando los distintos continentes, desfiló con orgullo y entusiasmo, portando banderas y ataviados con los colores y símbolos de sus respectivos continentes. La ceremonia estuvo cargada de emoción y espíritu deportivo, dando inicio a una semana llena de competiciones y actividades.
Durante los días siguientes, las instalaciones escolares fueron testigos de un despliegue sin igual de talento, esfuerzo y diversión. Desde carreras de relevos hasta competencias de salto, cada actividad reflejaba los valores del deporte y promovía la participación activa y el trabajo en equipo. Los alumnos no solo mostraron sus habilidades atléticas, sino también su compromiso con el juego limpio y el respeto hacia sus compañeros.
La culminación de estos emocionantes Juegos Olímpicos Al-Andalus 2000 llegó con el acto de clausura, donde se reconoció el esfuerzo y la dedicación de todos los participantes. África fue aclamada como el continente ganador del medallero, en un gesto que resalta la importancia de la diversidad y la inclusión en el mundo del deporte.
«Estamos encantados con el éxito de estas jornadas deportivas, que han superado todas nuestras expectativas», declaró nuestra directora. «No solo hemos promovido la actividad física y el espíritu deportivo, sino que también hemos fortalecido los lazos entre nuestros estudiantes y fomentado valores fundamentales como el trabajo en equipo y el respeto mutuo».
Con estas palabras, se da por concluida una semana inolvidable de competición, camaradería y celebración en los primeros Juegos Olímpicos Al-Andalus 2000, dejando un legado de inspiración y unidad en la comunidad escolar que nos acompañará hasta la próxima edición.